Tras el hallazgo de tumbas clandestinas en terrenos pertenecientes a iglesias que antes eran internados para niños indígenas en Canadá, se ha desatado toda una controversia contra las iglesias católicas.
Hasta el momento, se han descubierto 1148 tumbas sin identificar, varias con restos de niños indígenas que fueron llevados a la fuerza hasta los internados para convertirlos a la fe católica.
Las protestas por parte de las comunidades indígenas no se han hecho esperar y hasta el primer ministro Justin Trudeau ha lanzado disculpas por los atroces hechos del pasado e instó a la iglesia católica a hacer lo mismo. Además también comentó que dichos descubrimientos no quedarán impunes y se realizará toda una investigación al respecto.
Tales descubrimientos han abierto de nuevo las heridas de más de 150 mil niños amerindios, mestizos e inuit que fueron llevados a la fuerza a esos internados escuelas por parte de los religiosos católicos para borrar todo rastro de su cultura, hechos que se registraron hasta el año 1990.
Cuatro son los templos que han sido incendiados desde que se descubrieron las primeras tumbas clandestinas en terrenos cercanos a las ex escuelas o internados indígenas.