Un día después de sufrir una derrota simbólica con la pérdida del buque insignia de su flota en el Mar Negro, el Ministerio de Defensa de Rusia prometió el viernes aumentar los ataques con misiles sobre Kiev en respuesta a las supuestas “incursiones militares” ucranianas en suelo ruso.

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El viernes se escucharon potentes explosiones en Kiev, en apariencia las más intensas desde que las tropas rusas se retiraron de la zona a principios de mes.

La amenaza de intensificar los ataques contra la capital ucraniana se produjo luego de que funcionarios rusos acusaron a Ucrania de una operación aérea contra edificios residenciales en la región fronteriza de Bryansk que habría dejado siete heridos. Las autoridades de otra región fronteriza rusa denunciaron ataques similares el jueves.

La vida en Kiev ha ido recuperando gradualmente cierta normalidad luego de que Rusia fracasó en su intento de tomar la ciudad y retiró a sus tropas del norte del país para centrarse en una renovada ofensiva en el este. La reanudación de los ataques podría hacer que la población tenga que volver a refugiarse en estaciones de metro y convivir con el constante sonido de las sirenas antiaéreas.

Rusia reconoció que su buque insignia en el mar Negro se hundió tras quedar seriamente dañado tras una explosión.

El Ministerio de Defensa ruso informó que el Moskva, estaba siendo remolcado a puerto cuando “mares tormentosos” hicieron que se hundiera.

Horas antes habían anunciado que el buque estaba en llamas como resultado de la detonación de municiones que llevaba a bordo, aunque funcionarios ucranianos aseguraron que sus fuerzas habían lanzado dos misiles contra la embarcación.

Las autoridades rusas dijeron que los más de 500 tripulantes habían sido evacuados y que la causa del incendio estaba bajo investigación, sin confirmar ni desmentir la versión ucraniana.

“Mientras era remolcada… hacia el puerto de destino, la embarcación perdió el equilibrio debido a los daños sufridos en el casco cuando se produjo un incendio después de que explotaran las municiones. Dado el mar picado, la embarcación se hundió”, dijo este jueves la agencia estatal de noticias rusa Tass citando al ministerio.

Si se confirma el ataque ucraniano, el Moskva -de 12.490 toneladas. sería el buque de guerra más grande hundido por acción enemiga desde la Segunda Guerra Mundial.

Es el segundo gran buque que Rusia pierde desde el comienzo de su invasión. En marzo, el barco de desembarco Saratov fue destruido por un ataque ucraniano en el puerto de Berdyansk, en el mar de Azov y ahora bajo control ruso.

Buque de la URSS

El crucero de misiles Moskva se construyó a principios de la década de 1980 en la ciudad de Mykolaiv, en el sur de Ucrania, que entonces era parte de la URSS.

Mykolaiv ha sido bombardeada regularmente en los últimos días por las tropas rusas.

El buque de 186 metros de eslora era el barco líder de la clase Atlant del Proyecto 1164 de la Marina soviética. Inicialmente se llamó Slava (Gloria), pero luego pasó a llamarse Moskva (Moscú).

El principal armamento del buque de guerra son los misiles antibuque P-1000 Vulkan.

Se convirtió en el buque insignia de la Flota del Mar Negro en el año 2000 y desempeñó un papel clave durante la campaña militar de Rusia en Siria, que comenzó en 2015.

De 12.500 toneladas, el barco formaba parte de una flota rusa que merodeaba en alta mar y amenazaba el puerto ucraniano de Odesa.

Revés para Rusia

El gobierno ucraniano afirmó que el buque de guerra fue alcanzado por misiles Neptune fabricados en Ucrania, aunque Moscú no ha hecho referencia a ningún ataque enemigo.

Al tratarse del buque insignia de Rusia en el mar Negro desde el año 2000, el incidente es un revés significativo para la campaña bélica rusa, tanto por razones militares como morales, señala el corresponsal de asuntos de seguridad de la BBC, Frank Gardner.

Sea lo que sea lo que haya causado el gran incendio, la desaparición del otrora poderoso Moskva será visto como justicia poética en Ucrania, añade Gardner.

En términos más prácticos, es probable que este incidente provoque que los buques de guerra rusos tengan que alejarse más de la costa por su propia seguridad.